El primer paso para avanzar es conocer el punto de partida. Esta herramienta de autoevaluación permite a cada municipio conocer su nivel de madurez en materia de economía circular en el ámbito de la prevención y gestión de residuos, así como planificar las acciones necesarias para facilitar el cumplimiento de los objetivos marcados por la Unión Europea en esta materia y avanzar hacia un modelo de gestión más sostenible.
El diagnóstico está basado en la estrategia local de economía circular elaborada por la FEMP, y evalúa un total de once medidas a través de un sencillo test de siete preguntas por cada una de ellas.